La Batalla de “Sanra Tosa”
Ya he puesto
aquí un par de veces la referencia a uno de los capítulos
más heroicos de nuestro país, ya he hablado de San
Juantamaría que
se celebra el once de abril, pero ¿Qué crén?
ayudándole a mi hijo en
una tarea, buscando en la güikipedia me di cuenta de
que esa historia
tan significativa tuvo una precuela, y precisamente
hoy veinte de marzo
se cumplen… un chorro de años desde que los ticos de
esa época les
hicieron ver a los extranjeros que la cosa no era
como ellos decían, y es
que hoy si se me va a hacer larga (la columna)
porque aparte de que es
un día muy especial por ese motivo, también lo es
por otro motivo, pues
investigando como lo hacía, me llegó una
notificación del feisbuc que
me anunciaba que hoy también cumple años una muy
querida amiga
cibernética (¿qué? ¿hay de otras?) que al parecer
también nació un
veinte de marzo (no sé porqué digo “también” si
nadie más que yo sepa
nació este día) (bueno, este día no sé, todos los
días nacen muchos
chiquitos, por eso es que estamos como estamos) pero
en todo esto se
me cayeron los apuntes y se me hizo un revoltijo en
el cual no supe si
mi amiga estuvo volando bala en la casona de “San
Ratosa” (supongo
que tenía muchas ratas (la casona)) o San Juanta,
fue el que nació el
veinte de abril… pero bueno, no intentaré narrar
aquí los pormenores
(y por-menores es que algunos van a la cárcel) de la
fugaz batalla que
dicen que duró entre catorce y dieciocho minutos, y
claro que no se
sabe exactamente cuanto ¿quién va a estar
cronometrando en esa tan
peliaguda situación? Lo que sé es que los nuestros
expulsaron a los
filis hacia Nicaragua y ahí los remataría el Erizo
con su antorcha de los
juegos olímpicos. A mi hijo le pidieron que
investigara cuales eran las
costumbres, vestidos y comidas de ese tiempo, pero
lo único que está
documentado es que aquí no aguantaban nada y se iban
a agarrar a
bayonetazos con el primero que intentara conquistar
estas tierras para
formar imperios de dudosa procedencia, lo que
también todos saben
porque ahora me dicen que eso lo enseñan todos los
años en la escuela
(pero solo en las de Costa Rica, supongo) y yo creo
que me perdí esa
clase, de no ser porque de fijo me escapaba por
estas fechas, yo siempre
me escapaba para las celebraciones patrióticas, por
eso quizá es que
no soy muy fanático de nada, hubiera aprendido tan
significativo capítulo
de nuestra historia, pero nunca es tarde (bueno,
ahora sí, porque estoy
escribiendo esto a medianoche, ya es tardillo) Y por
otra parte aparte de
celebrar un año más de saber que tuvimos el mejor
ejército del orbe
(qué palabrilla!) celebrar el cumpleaños a mi querida ciberamiga
y recién
autodenominada mejor fan de esta columna.
Mely, sé que
que te dije que ibas a volar bala en la batalla, pero me puse
a pensar que al rato te disparaban y eso no nos iba
a gustar, en fin, feliz
“monomaniático” dijo Tres Patines y feliz batalla de
Ratasosa…de Sata…
de Rasasonta… de la precuela de San Juantamaría!
Ah, Mely, un regalito:
