Tiorías
No son los
chistes que cuenta el hermano de mi mamá…
yo tengo mis propias tiorías sobre la vida (y debajo
de ella)
(de la vida) una que he intentado extender con nulo
éxito
es la de la desaparición de los salones de baile, para
dar
paso a supermercados, de hecho en estos días por mi
pueblo
cayó otro… no sé que irán a abrir ahí, pero fijo viene
otro
chino con todo y chivas… y eso, como decía, se debe a
que
hace veinte años, en esos salones de baile, se
“fabricaron”
muchos bebés… los que hoy necesitan ser alimentados,
por
eso el cambio de salón a supermercado… lo repito a ver
si
la entienden y se la meten en la cabeza (la tioría)
también
hay unas que no las he inventado yo, está la tioría de
la
“envolución” (¿o era de la embolia? (la que tengo yo
en el
cerebro ya)) esa dice algo así como que los animales
que
habemos ahora en la tierra no siempre estuvimos aquí
al menos yo estoy completamente seguro de que no he
estado aquí siempre (antes estuve en la escuela… creo…)
pero más antes tampoco estaba, es un poco complicada
esta tioría, pues a algunas (¿han notado que si le
cambian
una letra a “algunas” dice “lagunas”?) personas les
choca
que hayan descubierto que somos familia de los monos…
y dicen que no, que la tioría verdadera es la que
viene en
la biblia de que juimos criados por dios padre hijo y espíritu
santo… (que sí, que hay muchos que se les hace un
enredo)
pero todo eso de la “involución” es muy tedioso hasta
para
mi… yo prefiero aquella de la generación espantosa…digo
espontánea, cuando las mosquitas salían por si solas
de las
boñigas de las vacas sin necesidad de costosos huevos
ni
atrasos por el estilo… o había una muy bonita que
también
me gustaba, de la antigua Grecia creo, que consistía
en que
al principio todo estaba desmembrado… andaba una
cabeza
por aquí, un brazo por allá, una pierna por acullá, y
que se
pegaban unos a otros a ver qué figura formaba (igual
que
cuando se me perdía la mayoría de los legos y tenía que
improvisar para ver como armaba algún muñeco medio mal
hecho) y que al final de todo el cuento, sobrevivía el
que
quedara más guapo… (igual que ahora) unas tiorías no
las
entiendo (ni otras tampoco) como esa de la tioría de
cuerdas
(o de locas más bien) que cuando la mencionan me
imagino
una guitarra o algún otro instrumento de cuerdas, como…
como… mmm, como… la guitarra… otra guitarra… bueno
esa es tan intrincada que ni siquiera me he dado a la
molesta
tarea de averiguar de qué se trata ni para qué sirve…
en
realidad, toda esta basura no sirve para nada ¿me da
de
comer? ¿me da para vestir? ¿me procura un techo digno?
pues no… entonces ¿qué hago aquí tiorizando sobre
asuntos
sin importancia? tengo una tioría… ¿eh? que me dicen
aquí con el indicador electrónico que no se dice “tioría”
¿también me va a salir con que no se dice “lión” ni
liopardo,
ni lio-té… ni “bacalado”? qué gente que le está “cambeando”
las letras a las palabras cada rato… me dicen que se
dice
teo-ría… o sea tiene que ver con algún dios y la risa…
o la
burla que nos han hecho respecto a todo esto… yo digo
que todo esto es un bananal… que diga, vanal y ya me
voy porque acabo de darme cuenta de que me vine con
la camisa sucia y tengo que ver como disimulo durante
todo el maldito día para que se fijen los menos
posibles...