Que no es lo mismo que falta de ofidio, porque a mi los
ofidios pueden perfectamente hacerme falta, pero el oficio…
también… pero esas palabras tan proféticas que decía mi
madre cuando uno se jalaba alguna torta: que falta de oficio!
aplica para la mayoría de las causas de los males de este
planeta, cuando las bocinas… que diga, las vecinas se la
pasan metiéndose en la vida ajena de los demás, que falta
de oficio! cuando roban, matan, similares y afines… que
falta de oficio! ahora vi que buscan ayuda para buscar al
abuelito de alguien que se perdió, que falta de oficio! déjenlo
que ande como a él le gusta (perdido y con alzheimer, fijo)
no se metan en lo que no les importa, la gente está en grupos
de esos que avisan cuando hay policías o tráficos haciendo
redadas para agarrar taxis piratas o cosas peores, que falta
de oficio! pero… ¿qué es un oficio? aquí entra la parte
didáctica de esta columna, hay varias definiciones para
el particular (si es un particular, no lo deje entrar, me decía
también mi mamá) está el oficio que hay que hacer en la
casa (que es muchísimo, por cierto) están las hojas tamaño
oficio, y también está el turno de oficio (o el oficio de turno)
que es algo que tiene que ver con juzgados y esas parafernalias
cuando yo crecía, allá por el siglo… digo, los años ochenta y
tantos, le preguntaban a uno cual oficio le gustaría ejercer
no le decían “profesión” como ahora, me parece que es algo
distinto, un oficio era como zapatero, carpintero, carnicero…
casi todo lo terminado en “ero” una profesión es, abogado,
arquitecto, doctor… casi todo terminado en… tragedia…
pero bueno, el asunto es que cada profesión tiene su oficio
(¿o es alrevés? (“oficio su tiene profesión cada”)) ya para
no enredarnos más con estos oficios, no confundir con
orificios, diremos que la falta de estos (de orificios no, de
oficios) es lo que nos tiene jodidos) (bueno, si nos faltaran
orificios también) pero hay gente que tiene mas orificios
de la cuenta, digo, oficios… que la situación está muy dura
para desaprovechar el tiempo, en mi caso, el tiempo me
desaprovecha a mi porque no consigo maquinar nada más
una vez que llego a la casa y caigo occiso hasta el otro
día… en fin, gajes del oficio… (o garajes del orificio también
se dice (al menos yo lo digo)) ahora me doy cuenta de
que estamos a último día del mes de setiembre, pero esto
no tengo que comincárselos si tienen un candelario… un
calenturiento… un cavernario… un caldo… un almanaque!
a la mano, que ya se nos fue el año y tampoco hicimos nada
trascendental… nos vemos el próximo… milenio, que he
estado abandonado este noble oficio de escribir (alivio para
mis lectores) (en realidad no son ni míos) yo los dejo porque
mi escritorio está lleno de oficio, de hojas tamaño oficio y
carta también…
