20/5/10

Encuentro irreverente en la calle

Encuentro irreverente en la calle

 Como todas las mañanas, me monto en mi carro, lo
enciendo y me vengo conduciendo tranquilamente
hasta donde me recoge el bus y siempre lo aparco
(o lo “parqueo” como dicen vulgarmente) en el mismo
lugar (creo que es lo “parqueo” porque es a un costado
del parque) (no del parque acostado), en eso que
vengo a “parquearme” y veo por el retrovisor a un
motorista hitleriano (con guantes en las manos)
(cómo dijo Sabina) que venía muy pegado a mi
(bueno a mi no, a la parte trasera de mi carro) y
no me dio tiempo de poner las direccionales porque…
diay porque ya me había metido en el parqueo, en
eso pasa el honorable caballero sacándome el dedo
(el dedo de él, no el mío) y gritándome:
-¡No ponga tanto la señal!- yo me bajo del carro y
le contesto:
-Es que no tengo… ¿algún problema?-
 El tipo da vuelta a su moto (en eso vi que traía una
pasajera que no paró de sonreír en todo el rato) se
para junto a mí y se queda viéndome
-Casi choco por no poner la señal- me dice
-Entonces póngala-
-Por no poner la señal usted-
-Ya le dije que no tengo, se me quemó, además
nadie lo tiene pegándose tanto a mi ¿y no es que
usted seguía directo? ¿Porqué iba a chocar conmigo?
¿acaso tengo imán?-
 El motorista se enchaquetó, (una chaqueta de cuero que
ya traía puesta) se bajó de la moto y le dijo a su putita:
-Este no sirve para nada, yo le pego-
A lo que le dije:
-Con que esas tenemos… ¿si hubiera servido para algo
no me pega? aprovechándose de los que somos cobardes
si no se enfrenta con un cobarde no gana un pleito…-
 Y cerré los ojos esperando el (o los) trancazos…
 Escuché como la tipa se reía…
 En eso venía mi bus, abrí los ojos y vi al envalentonado
machote (bueno, no sé si era machote, porque era pelón)
en guardia con los mazos que tenía como puños en alto
pero yo dije:
-Siento decepcionarlo, pero no debo llegar tarde al trabajo-
 y con un temblor casi incontrolable en mis piernas caminé
hasta el bus con toda la gente mirando la escena…
todos soltaron la carcajada pero lo curioso es que no se
reían de mí si no del cuadro del tipo alto, grueso y valeroso
de pie esperando la acometida… del aire sería, porque yo
ya venía sentado cómodamente en mi asiento de autobús.
Y no creo que sea tan culto cómo para saber lo que
es internet, por lo cual es difícil que lea esta columna
si lo hace y algún día vuelvo a encontrármelo, tengan
la seguridad de que saldré corriendo...




es internet,

2 comentarios:

Lola dijo...

Tiene su gracia lo que cuentas, toda una aventura para empezar el día. Sólo que hay dos cosas que me chirrían un poco:
1. No entiendo porqué la "tipa" que acompañaba al motorista tenía que ser una "putita".
2. La cultura e Internet no tienen porqué ir unidas....doy fe de ello.
Un saludo.

Jag Lake dijo...

Creo que tus dudas merecen respuesta (aunque aclaración, no creo)(no creo que yo pueda) primero, lo de la putita...ella no "tenía" que ser putita... pero lo era (ella lo decidió así, yo no tengo la culpa) segundo, te doy la razón la incultura no tiene que ver con la internet, lo dije en ese caso especial... sólo va para el tipo de marras.
gracias de nuevo Lola, eso es lo que necesito, gente que me desenrede...