Perversiones

Perversiones

 Ah, ahora si les interesó ¿verdad? pero no, hoy vamos

a estudiar las versiones de Per… ¿y quien era Per? vaya

usté a saber… (aunque eso me salió en Per-verso) y es

que yo tengo un conocido que se llama Perberto, no sé

si eso será lo mismo que pervertido… (o per-derramado)

para mi que pervertir proviene (o porviene) de pre vertir

que es vertir antes de tiempo, por aquí me corrigen y me

indican que no se dice “vertir” si no verter (este Word

me corrige a cada rato) entonces no le demos más vueltas

a la pronunciación y entremos en materia, empecemos

por reconocer lo pervertidos que somos, en todo sentido

yo tengo mis perversiones (y prevenciones en la fiscalía)

ustedes tienen las suyas (las perversiones) cada cual sabe

con cual olote se rasca, decía mi difuntagüela, pero yo

creo que hay perversiones más piores que las sexuales…

(bueno, no mucho, porque he visto cada caso en porno)

la verdad cuesta definir a un pervertido, yo siempre digo

que un millonario echándole el cuento a una mujer es un

conquistador, en cambio un pobre echando ese mismo

cuento, es un pervertido… así de simple… ¿de donde

vienen las perversiones entonces? hay de todo, desde

que un político se lanza para un puesto (mejor se lanzara

desde un puente…) ya lleva la mente pervertida… pues

no es el beneficio ajeno el que busca, si no su propio

bienestar, podemos mencionar miles de perversiones

que nos atestan y de las cuales “padecemos” hay gente

que los llaman “enfermos” o “desviados” (quise decir

que “nos llaman” (pero no venimos (bueno, si, a veces)))

(vuelvo a aclarar: eso solo nos lo dicen a los pobres…)

no obstante (no obstante, no me gusta utilizar esa frase)

toda esta cháchara informe y desgarbada solo la he usado

para denunciar a los peores pervertidos de la actualidad:

los ginecólogos… ¿Quién en Susano… (no sé si se llama

Susano el ginecólogo) en su-sano juicio estudia una carrera

solo para revisarle las partes íntimas a las personas?? por

eso dicen que un ginécologo es el que “trabaja” donde otros

se “divierten” y en ese tipo de perversión también entran

los urólogos, proctólogos y todo el que tenga que ver con

meter dedos y/o aparatos allá por donde no te da el sol

(ni siquiera en una playa nudista…) es una profesión que

muchos envidian… (yo no, a veces da mucho asco con

los prospectos que llegan ¿o se reservarán el derecho de

admisión?) Algunos me dicen que esa “enchilazón” mía

es el miedo a que ya casi me toca (ir al ginecólogo) No!

al maldito “prostatólogo” lo único que pido es que no

tenga los dedos muy grandes… el problema es que ya

luego del primer “chequeo” le quede a uno gustando y

se convierta en una perversión (más) como le dijo el

doctor a mi amigo Perberto luego de hacerle el dichoso

tacto ese: -Bueno, la próxima cita es dentro de dos años

y Perberto le contesta: -Ay, doctorcito, ¿no me la puede

dejar (ir) así como cada tres meses?