Una Pista Mas Acerca de la Biblia
Pero no es una pista de carros tampoco, si no que escribo esto
para aquellos que piensan que no me interesan las historias de
la biblia, claro que me interesan y siempre en semana santa, le
dedico al menos un rato al análisis de lo que ahí se menciona, en
esta ocasión le tocó el turno a un personaje que algunos creen
que no es interesante, ¡claro que lo es!, se trata de Abraham (y
me ayudó que como en esta semana dieron películas de este
tipo) (de este tipo Abraham no, de este tipo de películas religiosas)
resulta que empecé a ver la película cuando el ya mencionado
se casó con una señora llamada Sarai, sin embargo esta no le
podía dar hijos, por lo que le dio permiso a Abraham de meterse
con su concubina (o sin cubina) y esta si tuvo un hijo, porque
supuestamente Dios le había prometido vasta descendencia
(que ganga, con lo caro que está todo) pero Abraham no sabía,
porque aceptó la propuesta, en un momento no entendí muy
bien, pues me distraje ( o creo que fue que me levanté para
coger una tortilla con mantequilla porque me mordía el hambre)
en lo que iba llegando, una gente estaba haciendo un viaje
y Abraham ordenó que se llevaran unas “vituallas” (supongo que
por si acaso tenían el “período” las mujeres) muy prevenido
el muchacho, resulta que ya cuando Dios habló con Abraham
y le dijo que el hijo de la esclava no podía ser el heredero, que
tenía que pulsearla porque el asunto estaba raro… diay, seguro
de tanta insistencia, la tal Sarai por fin quedó embarazada ya
cuando tenía como setenta años (o sea que en lugar de hijo lo
que iba a tener era un nieto) pero eso no fue el final del cuento
aquí viene lo mejor: una noche en que Abraham estaba como en
“el quinto sueño” Dios lo llamó (porque siempre lo llamaba a
deshoras de la noche, debía ser por la diferencia de horarios en
los distintos países, claro si Dios estaba en el carnaval de Brasil
era de día, en cambio para Abraham allá en Ur (o no se dónde)
era otra hora, la cuestión es que se entabló un diálogo (en este
caso un “Dióslogo”) mas o menos así:
-Abraham… Abraham… ABRAHAAAAAAM!!!!!-
-Que pasa?, que sucede señor? “eme” aquí…-
-Si, yo lo pronuncié con la “eme” al final, porque si no hubiera dicho
“ABRAHAAAAAAÁ”, pero ese no es el caso, si no que debo pedirte
que sacrifiques a tu hijo Isaac…-
-No, por favor a mi hijo no…-
-Si a tu hijo-
Abraham renegó por lo bajo, para que Dios no lo oyera tapó el
auricular con la mano… con todo esto el pobre viejo no tuvo otra
alternativa que decirle a Isaac que fuera con el al centro…
-¿Y para que, papá?-
-Pues, para…para… para comprarte una cajita feliz en Macdonals-
-Ok, así pos si…-
Para no cansarlos con la historia resulta que cuando tenía lista la
leña, el fuego y el puñalote, el chiquillo como no era nada tonto, se
dio cuenta de que faltaba algo… ¡el animal para el sacrificio…! Oh, oh!
pero Abraham fue más rápido y lo agarró antes de que saliera huyendo
(de fondo la canción “Sacrifais” de Elton Jhon) sin embargo Dios lo
estaba viendo todo y se dijo: “este baboso si lo va a matar!” y de no
ser porque si le entró la señal en ese momento y llamó a Abraham,
este tuesta al propio hijo… aquí la moraleja es: hombre, no te tomes
a pecho los mandatos de Dios que a veces le gusta hacer bromitas de
este calibre, para confirmar lo que supuestamente ya sabe…
1 comentario:
Hubiera sido mejor que le pusieran sacrifais de los mojinos escozíos no le parece mae???
de por sí elton john es medio "rarito" y los mojinos también, así que en cuanto a eso la diferencia no es mucha...
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