De Vuelta En El Tiempo (Pero no A Tiempo)

De Vuelta En El Tiempo
(Pero No A Tiempo)
O sea como dicen en inglés “On Taim” o sea “En Tarima”
Como cuesta subir la cuesta… no solo la de enero
la de febrero, marzo y todos los meses del año, para
nosotros los pobres todo el año es pura cuesta, sin
embargo, existe en la historia (por lo menos en la
literatura) (por lo menos en la literatura de Jag Lake)
un héroe, un héroe clásico, incólume (aunque no se
que sea eso “incólume”, que no tiene “cólumes” )
“inrreverente” innato, invencible…, inservible…
Iba a dar un paso en el instante, luego, el instante
pasó y puso el pie en el aire, cayó patas arriba en
media calle, ahí, por la avenida central, se levantó,
se sacudió la ropa, que por cierto, no era para nada
acorde con la época y dijo: “no contaban con mi
astucia!!!”, (hasta que le bailaban las antenitas de
“vilín”) causó un cierto desasosiego en los transeúntes
y en el taxista… que lo atropelló…
Siete días después, ya salido del coma, empezó a
buscar la corporación “cláusula” (no confundir con
la “Cápsula Corp.” de Gokú, porque nos demandan
por violar los derechos (puros zurdos)) se dio cuenta
de que dicha corporación aún no existía, o nunca
existiría, pues había hecho algo en el pasado que
impidió que fuera creada…- ¡maldito Blasfemo!
¿por qué, te niegas a ayudarme??, ¿Qué te hice?
(aparte de dejarte en un orfanato), ¿por qué me odias
tanto?, ¿Qué te hice después de dejarte en el orfanato?
(aparte de meterte a un manicomio)-
De esta suerte se lamentaba Tufemo en medio de la
desolación (lo que pasaba era que no había “sol” por
eso lo de “des-solación” o sea, que estaba “des-solado”
o in-solado) (¿entendieron? ¿sí?) y como era de noche
entonces, mejor se fue a dormir, para que al otro día
no se encontrara tan “des-solado” y hablando de
helados…ya necesito lentes, no veo ni ma…ngos…
Tufemo se cambió el disfraz de Chapulín Colorado
que traía desde el ’78, cuando pasó por ahí como
un vendaval y dejó sin vestuario el programa de
Chespirito (pero ese tema ya lo toqué antes), luego
se puso saco y canasto (que diga, saco y corbata) y
volvió a entrar a las oficinas de la municipalidad…
(para retirar la patente, que de nada le había servido
en estos retrocesos y avances en el tiempo, no vendió
ni medio litro de guaro), se abalanzó sobre siete
clientes majaderos y los hizo papilla (desde eso se
convirtió en mi héroe), aquí, el cliente nunca debe
tener la razón, aparte de ignorantes, son energúmenos
y prepotentes (lo contrario a “ovni-impotentes”) y
hablando de ovnis…Cuando la guardia sacaba a Tufemo
arrestado y sin poder cambiar su patente de licores por
venta de cachivaches, este se volvió y prometió volver
por segunda vez (cualquier parecido con cierto personaje
bíblico es mera coincidencia) lo que pasa es que a
diferencia de este, Tufemo, ya había “vuelto” como
diez veces (sería por la goma que se manejaba, o por
el golpe con el taxi, que le provocó alguna contusión
seria (seria, no en broma)) entonces “volvía” con
frecuencia (con frecuencia modulada, depende de cómo
usara la máquina del tiempo).
y hasta aquí este capítulo, que ya me estoy enredando
más de lo acostumbrado.