(Segunda Parte???)
Quedamos en que la protagonista (que son
los que están a favor de los “tagonistas”) la
había dejado el bus que la transportaría a la
granja donde vivían sus tíos ( o eran los abuelos?
lo que pasa es que me da pereza leer la parte
anterior…) entonces se encontró a Tufemo que
venía de pagar una cuota en importadora Monge
llevaba ratos refunfuñando porque al parecer
le cobraron mas de la cuenta, y como al actor
que hacía de Gustavo Felipe Alonso lo habían
despedido por berrinchoso y se encontraba
desempleado, decidió hacerse el payaso cuando
vio al montón de cámaras filmando (que no es
lo mismo que firmando) las escenas para la novela
Entonces María Gertrudis (como era que se llamaba?)
Crisantema, o como fuera ( o adentro…), la cuestión
es que llegó con Tufemo al bosque donde retozaban
las vacas y cabras y demás nimiedades, pero el
abuelo de María Escandelabria no estaba de acuerdo
con el casamiento de su nieta (ni siquiera estaba
de acuerdo con el suyo propio) desde que era el
otro actor el que la iba a cortejar (cortejar: cortar con
una teja) y menos viendo a semejante prospecto que
venía con ella, un carajo vestido con enagua corta
y un ramal en la jupa… (cualquier parecido con
un personaje de la antigua Grecia es mera coincidencia)
y como en todas las novelas, el roco se opuso, la
mocosa malcriada se reveló y en ese güiri-güiri
a los nueve meses quedó embarazada…( o fue
al revés??, primero quedó embarazada y a los
nueve meses nació un Tufemito) pero la cosa
no terminó ahí… pues hay que tragarnos como
media hora de créditos y reparto.
Tuvieron suerte mis queridos lectores de que
esto fue una novela en dos actos (mejor dicho
en dos rápidos capítulos) es lo que se denomina
una novela relámpago (pues no llega ni a mini
serie) (ni siquiera es serie , digo seria) como
epílogo podemos decir (o mejor no dijéramos
nada en absoluto) que Tufemo no aguantó
mucho a María Crisópoda y mejor continuó
con su búsqueda del Santo Dial lo cual se le
había olvidado que tenía que cumplir (aunque
en capítulos pasados lo haya encontrado)
pues, pues, para tener algo que escribir ¿no?
así que esperen mas aventuras de Tufemo en
la antigüedad y también en el presente, donde
ya tiene un hijo, y los dejo porque ya me toca
la pastilla de la tarde…
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