Algo de Historia
Parece mentiras , luego de las felicitaciones
de mi antiguo patrón don Nicanor , y las
bendiciones que me echaron por pegar la
lotería , me compré un pedacito de tierra
( aparte de la que andaba en el pescuezo )
allá pa' dentro de Dota y empecé a trabajarla
cuando les contaba a los peoncillos la trifulca
la vez que fui por la plata a la junta , se morían
de risa , a la hora del aguadulce , siempre me
pedían que les contara , de cuando fui pobre
bueno , la verdá es que yo fui pobre , pues ,
toda la vida ,y crecí en una familia numerosa
eramos doce patas vueltas , cuando le preguntaban
a mi tata que cuantos hijos tenía , decía :
--tengo doce--y le preguntaban sorprendidos :
--¿ y todos vivos?--
--que va-- respondía mi tata
--todos , una manada de sorompos , sampaguabas--
pero en fin y aquí estoy , "chapiando" potrero a
pata pelada , me dicen que porque no me compro
unos zapatos , pero que va , no me acostumbro
me "aprietan" demasiado , mihijo Moncho me
a dicho que con la plata que sobró de la finquilla
me compre un carro , estoy pensandolo , total
pa' que un chunchereco de esos ? , si ni se
como se "manija", la vieja me dice --Teófilo ,
si vas a tener que ir a la capital , cuidate de los
"maliantes" , que vay te roban--y yo la calmo
--que va , con el susto que les metí el otro día
no creo que vuelvan a meterse conmigo--
En aquellos tiempos todo era muy difícil , muy
muy difícil , dormíamos en el suelo , en estera,
"est-era" uno de los principales problemas ,
que aquejaban a la gente , pues aparte de
pulgas y alepatos , se le pegaban las niguas
a uno y era todo un carnaval intentar
sacárselas , en cuanto a lo del carro pues
mas adelante , ahí veré , si me voy con
mihijo Moncho de nuevo , pa' la capital
ahí les estaré teniendo al tanto , por ahora
levántense muchachos , que el corte "sestá"
poniendo duro y el breñón está muy enmontado
y cuidado con las condenadas "sincejas" , que
al rato se las encuentra uno enrolladas listas
pa' mandarle el ñangazo a uno , si son venenosas
"pior" la cosa , y así recibo el ocaso , en esta
finca que me costó cuatrocientos cincuenta
colones , con todo y casa...
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