Parí 2024
Es así como lo leen, no me comí la “s” porque yo
no acostumbro a comerme las “eses” alguna que
otra cosa rara si, pero las “eses”
no, gracias… y
qué es lo que tiene tanta
gracia hoy en el mundo?
pues eso, los juegos olímpicos
(¿eso no es una
marca de calzoncillo?) y sus
rituales que han hecho
que parte del grupo mas
fundamentalista pierda la
cabeza… (lo de la “funda” se
lo acepto, pero ni tan
“mente-lista” son) desde que
se inauguró con una
supuesta emulación de la
última cena, hasta las
boxeadoras “machos” ha pasado,
por diferentes
tipos… (casi todos tipos) de discrepancias
y varias
desaveniencias que ha sido
motivo de críticas y
descarnios por parte del supra
dicho grupito…al
menos a mi ni me va ni me
viene (como todo) yo
ni veo eso, pero las redes
sociales están que ya
casi explotan de tanto “dime y
que te digo” que no
conduce a ningún lado…entonces
no me queda
otra que verlo a cada rato, lo
de los hombres que
se sienten mujeres y luego
resulta que mas bien
eran mujeres que se parecen a
hombres y el
enredo que se les ha hecho a
los “jeiters” que
ya no saben con qué motivo
lanzarles estiércol…
una única cosa digo: sea
hombre o mujer, métase
con uno de su tamaño… (fueron
varias cosas) pero
estresarse por competencias
que datan del tiempo
de los cavernícolas es perder
el mismo… otra cosa
que tiene en vilo a dos grupos
antagónicos (más
“agónicos” diría yo) como los
son el feminismo y el
machorrismo… es lo de la tal “Zoro”…
“Poro” “Goro”
(Goro y Quintaro) “Raro”… Roro,
con ese nombre,
no debería salir a la calle,
de que les vuela la cabeza
que cocine y limpie (y no sé
que mierda hace, no la
he visto, ni la quiero ver) se
nota que no han visto
la cantidad de videos que hay
en yutú de “tutoriales”
para limpiar la casa, que
hacen mujeres con poca
o transparente ropa, y todo
esto para qué? obvio para
las visitas y monetizar… porque
como me dijo un primo
en una tertulia una vez: “pelarse
el culo es un buen
negocio y nunca pasará de moda”…
(tertulias muy
profundas que sostenemos a
veces) más bien esta tal
Roro fue sobrevalorada, pero
sin mérito alguno, pues
algo normal en la vida… parece
que ya no podemos
ser convencionales porque
saltan los delicaditos a
revolcarse en su miseria… ahora
la pregunta es:
¿quién ganará las olimpiadas?
o ¿quién limpiará
las “oganaras”? ah no… que ya
nadie limpia porque
es machismo…